El recambio dentario es una etapa
muy importante para la salud oral de los niños.
Entre los 5 y los 7 años es la edad en la que los
dientes de leche comienzan a caerse, suele hacerse en el mismo orden que fueron
saliendo los dientes de leche. Empezando por los dientes centrales inferiores.
No es recomendable que se fuerce la caída del diente tirando de él, si puede
moverse con la lengua o estimular su caída con alimentos duros, (comer fruta a
mordiscos, bocadillos…).
A veces puede ocurrir que el diente definitivo salga y
aun no se ha caído el diente de leche formando dos hileras si este es el caso
de tu hijo, debes acudir a un dentista para niños (odontologia pediatrica) , que ayudará a que se caiga y así se
recoloque en el sitio que debe estar o puede ocurrir lo contrario que el diente
de luche se caiga antes de lo previsto y el diente definitivo tarde en
erupcionar. También deberás visitar a un dentista infantil si a los 7 años aún
no le ha salido ningún diente definitivo.
No te olvides de pedir cita para las
revisiones, en las que el dentista podrá ir vigilando la salida de los dientes
definitivos y aconsejar una ortodoncia en caso necesario. En los niños que
todavía tienen dientes de leche se pueden poner aparatos que ayuden hacer sitio
para sus dientes. Además conviene reforzar os hábitos de higiene oral ya que
estos dientes deben durar toda la vida.
Cuando empiezan a salir los dientes definitivos
conviene reforzar los hábitos de salud bucal, ya que las piezas nuevas le
acompañarán toda la vida. Te recordamos algunas pautas básicas:
- Recuerda
cepillarte los dientes 3 veces al
día: después de la cada comida
y sobre todo por las noches.
- Busca
un cepillo de dientes y una pasta adecuados a su edad.
- En
torno a los 6 años podemos empezar a introducir el hábito del enjuague
bucal, siempre recordándole que debe escupirlo todo.
- El hilo
dental nos ayudará a eliminar los restos de placa interdental, donde el
cepillo de dientes no llega. A partir de los 8años ya podrá empezar a
usarlo él solito. ¡Asegúrate de enseñarle una buena técnica!
- Si tu
hijo lleva ortodoncia, la higiene bucal es aún más importante para evitar
que se acumulen los restos de comida y placa dental.